Si nos hubiesen dicho al entrar el 2020 que este iba a ser un año en el que toda nuestra realidad se iba a desmoronar para dar paso a otra completamente diferente, posiblemente habríamos tachado de loca a la persona que nos lo hubiera comentado. Nos parece lógico, porque lo que viene ocurriendo en los últimos meses es algo digno de una película de ciencia ficción. La llegada del coronavirus hasta nuestros días ha provocado un terremoto sanitario por el cual ya han fallecido decenas de miles de personas en todo el mundo y que nos ha obligado a permanecer encerrados en casa más de tres meses.
En la llegada de la nueva normalidad, estamos teniendo que asumir un montón de nuevos hábitos que nos ayuden a no contagiarnos y provocar rebrotes, algo que no se está consiguiendo teniendo en cuenta las noticias que van surgiendo cada día y que nos atemorizan cada vez un poco más. Es necesario implementar todas las medidas habidas y por haber para tratar de contener la propagación de un virus que ya hemos visto que puede llegar a ser letal y a causar estragos realmente grandes en nuestra sociedad.
El papel de la ciudadanía es fundamental en lo que tiene que ver con la contención del virus. Es algo que ya sabemos. Uno de los síntomas de la enfermedad es la fiebre. En la noticia que a continuación os enlazamos, que pertenece al portal web especializado Infosalus, se informa de por qué hay que estar ahora más atentos que nunca a si superamos los 37 grados. Y es que ese puede ser el indicador que nos haga sospechar que nos hemos contagiado. Desde luego, que los mecanismos de defensa ante la entrada de un virus en nuestro cuerpo se hayan activado (que son los que provocan la fiebre) es una señal que no podemos desoír.
La gente se pregunta: ¿entonces no podemos ir a los bares? Es evidente que, si existen síntomas como la fiebre, es mejor quedarse en casa. Si no los padecemos, podemos acudir a este tipo de lugares, pero siempre tomando todas las precauciones. Precauciones como las que se destacaban en la noticia que os dejamos a continuación, publicada en la página web oficial de Antena 3 y que fueron promulgadas por el Ministerio de Sanidad. Estas precauciones consistían en reservar mesa antes de acudir al establecimiento, lavarnos las manos con agua y jabón antes de salir de casa, mantener la distancia de seguridad en el establecimiento y apostar por espacios al aire libre y libres de humo.
Son muchas las medidas que se están tomando en muchos bares y edificios para identificar si una de las personas que los visita sufre algún síntoma de coronavirus, como lo puede ser la fiebre. Una de las medidas que parece estar triunfando es la detección de la fiebre a través de cámaras termográficas. Los profesionales de Ibertronix, que se están encargado de comercializar productos de este tipo, nos han comentado que están recibiendo una cantidad extraordinaria de pedidos en las últimas semanas.
Una buena noticia
Está claro que, si se demanda un producto como lo es un sistema de detección de fiebre como el que hemos comentado, es que la conciencia de la gente respecto al problema al que nos enfrentamos ha crecido. Y esa es una muy buena noticia, qué duda cabe. Solo si tenemos una idea de la magnitud de lo que tenemos delante, tendremos la capacidad de resolverlo. Y parece que, poco a poco, nos hemos ido dando cuenta de la magnitud del problema del coronavirus, que es bastante grande y que requiere de las aportaciones de todos y todas.
Tenemos que estar muy atentos ante la aparición de cualquier síntoma que tenga que ver con el COVID-19. Ser capaces de detectarlo rápidamente es de una importancia tremenda a la hora de evitar nuevos contagios y provocar un nuevo brote. Hay que recordar que, aunque seamos jóvenes y los efectos de la enfermedad no sean tan potentes en nosotros, podemos contagiar a las personas que nos rodean, que habitualmente son a las que más queremos. Prevenir el contagio e identificarlo rápido un ejercicio de responsabilidad y de amor.
Todavía queda bastante para poder decir que la batalla ha sido ganada. El desarrollo de una vacuna llegará, no nos cabe la menor duda, pero hasta entonces tendremos que tener mucho cuidado para evitar que sigan aumentando los casos y los rebrotes. Desde luego, si seguimos por esa línea, que a nadie le quepa la menor duda de que volveremos a estar confinados. Y más pronto que tarde. Por eso, os pedimos la máxima de las precauciones y la mayor de las fuerzas. Pronto saldremos de esta.